Las acciones de Tesla (NASDAQ: TSLA) experimentaron un descenso significativo el jueves, cayendo aproximadamente un 10%, tras la divulgación de resultados trimestrales decepcionantes y un pronóstico poco alentador. En su informe del cuarto trimestre, publicado después del cierre del mercado, la compañía líder en vehículos eléctricos no cumplió con las proyecciones de ingresos y beneficios, al mismo tiempo que proyectaba un crecimiento “notablemente inferior” para 2024.
Durante el trimestre, los ingresos de Tesla aumentaron un 3% interanual, alcanzando los 25.200 millones de dólares, aunque se situaron por debajo de la estimación consensuada de 25.900 millones de dólares. Los ingresos de la división automotriz crecieron un 1%, llegando a los 21.600 millones de dólares. En términos de beneficio neto ajustado, la cifra se ubicó en 2.500 millones de dólares o 71 centavos por acción, mostrando una disminución del 39% respecto al año anterior, y sin cumplir con la estimación de 73 centavos por acción.
El beneficio neto GAAP totalizó 7.900 millones de dólares, un aumento del 115% interanual, pero con un impulso notable proveniente de un beneficio fiscal único de 5.900 millones de dólares. Factores como unos gastos operativos un 27% más altos, ascendiendo a 2.400 millones de dólares, y la estrategia de reducción de precios para impulsar las ventas, afectaron la rentabilidad de Tesla.